Charlando {Rose & Susan W.}

Con Me prepare rápidamente para ir a ver a Melisa al Starbucks, yo encontraba carisimo ira a ese lñugar pero como me habían invitado, no me hice de rogar, al llegar vi a melisa ya sentada con un libro, me acerque lentamente por la espalda estirando de a poco mi brazo, para quitarle el libro, cuiando porfin lo había agarrado sonreí .- Booooo .- dije entre risas

off: supuestamente no se sabe aún lo de mi hermana

Eso es lo divertido.- dije riendome ante la reacción de Melisa.- Y como esta mi padre- le pregunte con toda la intención de molestarla

Estaba vagando por las calles de Forks, cuando me topé con mi tienda favorita de bebidas, "Starbucks", solía ir muy amenudo en New York, y aquí no iba a ser una excepción. Entré y ví a la chica que me encontré en el bosque el otro día. Me acerqué a donde estaba y la salude. -Hola Rose. Le dije alegremente. Miré a la chica que estaba con ella, y la saludé también. -Hola, Soy Susan. Dije presentándome.

Susan.- dije alegremente.- como estas .- pregunte acercandome a saludarla con un abrazo.- ella es melisa mi madrastra.- dije bromeando ante la relación con mi padre.- que haces por aca.- le pregunte amablemente

-Encantada. Le dije a Melisa sonriendo. Escuché a Rose. -Bien, ¿tú? Por cierto, no parece que sea tu madrastra. Dije con una sonrisa a lo que aparentaban, aunque, no sabía lo que era Melisa, sabía que no era humana. -Bueno, creo que soy fans número uno de esta cafetería. Dije en broma. -Espero que no haya nadie. Dije sin preguntar por el sitio y me senté en el.

- De mi parte si tu me invitaste a tomar café así tu pagas.- dije sacandole la lengua a Melisa .- ya desde cuando no te enteras que eres mi madastra.- dije riendome fuertemente..

Sonreí al escuchar lo que decían, la verdad es que la palabra madrastra te hacía sentir vieja y malvada como dijo Melisa. -Yo quiero un capuchino. Dije con una sonrisa. -No tienes aspecto de mala. Así que.. lo dudo. Dije con una sonrisa intentando entrar en la conversación. Me balance levemente en la silla.

Ya sabes a lo que me refiero Mel.- dije riendome ante su comentario.- Yo tambieén quiero un capuccino pero vainilla por favor .- le pedí a la camarera rápidamente para seguir conversando con las chicas.- y no creo que seas la mala de la pelicula Mel, solo es divertido decirte asi.-- dije con una gran sonrisa

Me reí. -¿En que sentido? Pregunté refiriéndome así era de raza un ángel o sí simplemente lo decía en broma. Esperé a que el camarero trajera las bebidas. Miré hacia de donde salían los camareros que se dirigía aquí con una bandeja y con los vasos del starbucks.

Susan deberias trabajar en lo que es el sarcasmo y el doble sentido.- dije riendome mientras tomaba el café y sorbeteaba un poco.- Y Mel acostumbrate porque si dañas a a mi padre te corto la cabeza.- dije con una sonrisa era en si parte broma y parte real ya que si dañaba a mi padre se las veria conmigo, pero nunca tan exagerada para perseguirla y sacarle la cabeza

Susan deberias trabajar en lo que es el sarcasmo y el doble sentido.- dije riendome mientras tomaba el café y sorbeteaba un poco.- Y Mel acostumbrate porque si dañas a a mi padre te corto la cabeza.- dije con una sonrisa era en si parte broma y parte real ya que si dañaba a mi padre se las veria conmigo, pero nunca tan exagerada para perseguirla y sacarle la cabeza

Sabes que bromeo no tienes porque poner esa cara de terror.- dije riendome ante su expresión, mientras tomaba un poco mas de café.- ya sabes eso de las hijas sobreprotectoras.- diej riendome

Me reí. -Tranquila Rose, ya te pediré a ti clases para que me enseñes, ¿Cuándo te viene bien? Le pregunté en broma a Rose mientras que traían los cafés. Cogí mi capuchino y le di un sorbo.

Si no hay ningún problema con enseñarte Susy .- dije riendome ante suu comentario.- También podría darte clases de como mentir y esas cosas.- dije recordando su poca capacidad de mentir y todo eso

Le miré con una mirada fulminante. -Sí, pero espero que no me pagues demasiado. Añadí en broma. -Que recuerda que estamos en crisis. Le dije en broma mientras seguía balanceando la silla para atrás y para delante.

yo soy buena mentirosa, muy peleadora pero aún así irradio alegria.- dije sacandole la lengua por su comentario.- no de verdad crees que soy muy apagada .- dije sin poder creermela

Negué con la cabeza. -No. Añadí con una sonrisa. Cogí el capuchino y le di un sorbito. -¿Y qué contáis? Pregunté ya que nadie hablaba.